“Cuando comenzó la epidemia del COVID-19, y sobre todo a partir de que tomamos conciencia del fuerte impacto que tendría en nuestras vidas, llamaron mi atención algunas actitudes que bien podríamos definir como irracionales. Ellas trazaban un amplio espectro en el que cabían desde la búsqueda de ´soluciones mágicas´ para contrarrestar la enfermedad, hasta las acusaciones racistas y estigmatizantes del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, visibles en algunas de sus referencias al ´virus chino´´”, señala doctora Marcela Vignoli, investigadora del Instituto Superior de Estudios Sociales (ISES, CONICET-UNT).
Esta serie de reacciones y sentencias desencadenaron en la historiadora una necesidad de procesarlas a partir del conocimiento científico. A medida que se encrudecía en el mundo la situación epidemiológica, y, sobre todo en la Argentina, Vignoli se interesó aún más por tratar de relacionar lo que estaba aconteciendo con sucesos semejantes que, a lo largo de la historia, produjeron profundos cambios en la sociedad. De esta inquietud nace entonces la idea de realizar un ciclo de entrevistas con la voz de expertos nacionales y extranjeros en la temática, para dilucidar y comprender si estas reacciones y “encasillamientos” se advirtieron en otras crisis sanitarias de la historia.
Con repercusiones satisfactorias, tanto a nivel de convocatoria como en referencia a la proporción de conocimientos exhibidos, la actividad que comienza en marzo y se extiende hasta mayo de este año, se materializa hoy en el lanzamiento del libro Epidemias y endemias en la Argentina moderna. Diálogos entre pasado y presente, en el que la investigadora del ISES recoge el aporte y la opinión de estudiosos calificados en la temática indicada.
Un llamado de “auxilio de la experiencia histórica”
Vignoli recuerda que hace unos años invitaba a Tucumán a Patricia Palma -investigadora del Departamento de Ciencias Históricas y Geográficas de la Universidad de Tarapacá, en Chile-, con el propósito de que disertara sobre la peste bubónica que afectó a Lima a principios del siglo XX. Para las autoridades peruanas de ese entonces, la epidemia en curso se trataba de un “flagelo asiático”; estigma que, en el contexto de la discriminación sufrida por la comunidad china en ese país desde mediados de la centuria, se reeditaba y avivaba con la crisis reinante. “Fue entonces que pensé que un diálogo virtual con la experta sobre los acontecimientos desencadenados en el Callao y Lima, podía ser interesante para nuestros alumnos”, reflexiona Vignoli. Esta primera participación se transmitió a fines de marzo vía Instagram para la comunidad académica de la Facultad de Ciencias Naturales e IML (Instituto Miguel Lillo). El intercambio de ideas “no solo discurrió sobre acontecimientos pretéritos, sino que abarcó también la problemática actual”, señala la especialista en referencia a la charla, para luego subrayar que la audiencia sobrepasó los límites argentinos al incluir a interesados de Chile, Perú y los Estados Unidos.
Al mismo tiempo, Vignoli detecta que “procesar los desafíos actuales con auxilio de la experiencia histórica constituía una demanda insatisfecha”, y por ese motivo se propusó motorizar un segundo intercambio; en esta oportunidad, con el historiador Diego Armus, a quien conocía desde 2015. “Deseábamos que nos hablara sobre la tuberculosis, una de las endemias que asolaron a Argentina durante largas décadas, y a la que él dedicó una de las obras más significativas editadas en el país desde la perspectiva de la historia social de la salud y la enfermedad”, explica la investigadora. Y agrega: “El resultado del intercambio con Armus –a quien agradezco su buena disposición ante mis consultas, planteadas durante el desarrollo del ciclo, y el hecho de que me alentara a seguir realizándolo, y luego a publicar lo surgido de él – volvió a sorprendernos, tanto en el número de espectadores durante el encuentro virtual, como en torno a la proveniencia de los mismos”. En ese sentido, Vignoli valora mucho más la propuesta que comienza sin horizonte claro, pero que para entonces ya se había convertido en una actividad de visible trascendencia.
Las siguientes mediaciones fueron la de Carlos Dimas, “a quien había conocido en el Archivo Histórico de Tucumán cuando, en el marco de la elaboración de su tesis doctoral, buscaba huellas de las epidemias del cólera que afectaron a la provincia en la segunda mitad del siglo XIX”; la de Eric Carter, “con quien había intercambiado ideas en el ISES durante su estancia patrocinada por la Fundación Fullbright, también en 2015”. Asimismo, Adrián Carbonetti, del Centro de Investigaciones y Estudios sobre la Cultura y Sociedad (CIECS, CONICET-UNC); Daniela Testa, y los investigadores Juan Zabala, del Instituto de Salud Colectiva (ISCO, UNLA), y Adriana Álvarez, del Instituto de Humanidades y Ciencias Sociales (INHUS, CONICET-UNL), completan la lista de expertos que analizaron las epidemias de malaria, gripe española, poliomelitis, chagas y dengue, y coronavirus, respectivamente.
“Como dije previamente, las entrevistas se sucedieron en un preocupante contexto signado por el avance de la pandemia tanto en el ámbito global como nacional. Entonces, al recurrir a la mirada de especialistas, nos aproximarnos a los temores, a los diagnósticos, para obtener respuestas y contar con herramientas que nos permitan entender las situaciones derivadas de las epidemias y endemias en nuestro país o en casos como el de Perú”, reconoce la autora. En ese marco, advierte que el lector se encontrará con que el libro avanza entre dos registros temporales, y en los que la vigente emergencia sanitaria “no puede ser considerada un simple telón de fondo o pretexto para abordar el pasado”. Por el contrario, cree Vignoli: “El diálogo con los expertos también pretendía recuperar las circunstancias particulares que atravesaba cada uno, así como sus reflexiones sobre esta situación inédita”. De hecho, para la audiencia este factor fue de considerado de sumo interés, ya que la propuesta remitía a experiencias provenientes de escenarios distintos (Estados Unidos, Chile, provincias o localidades argentinas), y en cuyos ámbitos -como es de suponerse y queda reflejado en las entrevistas- se desplegaron variadas estrategias frente a la problemática ocasionada por el virus respiratorio.
Es importante destacar que la obra también da cuenta, entre otras especificidades, del rol del Estado durante el contexto de la pandemia, así como los impactos producidos en la economía y en el tejido social por sus implicancias. Además se visibilizan las figuras que se destacaron en la lucha contra los flagelos, y el accionar de la prensa en cada proceso. “Las visiones renovadoras, los diálogos interdisciplinarios y la exploración de nuevas fuentes nos acercaron a una serie de nuevos temas y problemas planteados por un enfoque histórico que no solo se interesa por lo institucional, sino que incorpora también en sus análisis a nuevos actores y se interroga al respecto. Pero eso no fue todo lo alcanzado, concluye Vignoli: “La experiencia fue importante también en el terreno de la divulgación científica con un público que demostró estar interesado y receptivo ante relatos encarados desde una perspectiva sociocultural, y un punto de vista no focalizado en el estilo de las versiones tradicionales de la historia argentina, que todavía prevalece en la divulgación del pasado nacional”.
Agradecimientos de la investigadora
El éxito del ciclo, de acuerdo con Vignoli, fue posible por el decidido apoyo del doctor Hugo Fernández, decano de la Facultad de Ciencias Naturales e Instituto Miguel Lillo de la UNT: “No sólo dio un respaldo institucional a la actividad, sino que se comprometió realizando importantes sugerencias sobre la temática y asistiendo con interés y entusiasmo a los encuentros”. La Secretaría de extensión y comunicación de la mencionada Facultad también jugó un rol preponderante, ya que ideó la dinámica de las entrevistas y su difusión en diversas plataformas, que incluyeron también la retransmisión de las entrevistas por Radio Universidad Tucumán.
“El proyecto editorial tomó cuerpo a través de los aportes de la Facultad de Ciencias Naturales e IML, de la Secretaría de Extensión Universitaria de la UNT y del Instituto Superior de Estudios Sociales ISES (UNT-CONICET), a cuyas direcciones agradecemos”, concluye la investigadora.