Hace poco menos de un año Facebook pasó a llamarse Meta y así fue como millones de usuarios alrededor del mundo comenzaron a conocer el concepto de Metaverso. Según la consultora internacional Bloomberg, el mismo escalará hasta convertirse en un negocio global de más de 800 mil millones de dólares.
Por lo tanto, es cuestión de tiempo hasta que las empresas e instituciones empiecen a sumergirse en este nuevo universo digital. De hecho ya hay quienes tomaron la iniciativa. En Argentina, la Universidad Católica de Salta (UCASAL) presentó a su comunidad su Metaverso.
Durante este semestre, diez universidades importantes del hemisferio norte ofrecerán a sus alumnos una experiencia nueva bajo el concepto de metaversidad. Tanto profesores como estudiantes vivirán una realidad virtual inmersiva al colocarse cascos y reunirse sincrónicamente.
Mientras cada uno vive la experiencia desde su propio tiempo y espacio, se convierten en testigos de una nueva educación. Si bien a lo largo de la historia la manera de enseñar atravesó diferentes cambios, el Metaverso aterriza en la propuesta académica para brindarle a los estudiantes una forma mucho más entretenida, divertida y atrapante. Porque, ¿quién no quiere aprender sobre literatura sentado en el aula de Harry Potter? ¿O aprender de historia mientras viaja en un ferrocarril de inicios de 1900? ¿O hasta incluso manipular un corazón desde dentro de la válvula aórtica?
“Estamos convencidos de que la convergencia de todas las formas posibles de estudiar otorga grados de libertad a las nuevas generaciones, una realidad que antes era impensada para quienes nos toca tomar decisiones hoy en las universidades”
reflexiona Rodolfo Gallo, rector de UCASAL.
Y agrega: “La tecnología de los hologramas, el mundo de la realidad virtual, los simuladores, el metaverso, la utilización de herramientas de inteligencia artificial en algunos procesos esenciales de las universidades, son claves para los graduados del futuro”.
La tecnología como prioridad
Hace ya años, UCASAL lleva adelante un programa de transformación digital y de innovación educativa que la destaca en el país. “El metaverso es sólo un recurso más en el camino elegido. Por ejemplo, en la pandemia actuamos contra reloj, para transformar nuestras aulas físicas en digitales; la experiencia de más de 30 años en educación a distancia nos ayudó mucho a tener nuestros docentes y la tecnología preparados para retomar las clases en modalidad virtual, a solo 15 días de iniciado el aislamiento obligatorio. Incluso, asesoramos a otras casas de altos estudios de Latinoamérica en ese proceso. Ahora es tiempo de seguir explorando nuevas posibilidades”, señala Gallo Cornejo.
En cuanto a la implementación de su propio Metaverso, la universidad tiene como objetivo conseguir interacción dentro de la comunidad UCASAL. La experiencia consiste en humanos representados por avatares en un ciberespacio. Allí, se puede socializar, acudir a conferencias o charlas, ir de compras o asistir a conciertos. Las posibilidades son casi infinitas.
El metaverso UCASAL está constituido por tres grandes áreas. Por un lado, un área académica y de esparcimiento que incluye una tienda de merchandising, una cafetería, una librería virtual, y stands donde se explorarán transacciones electrónicas; por otro, un área de labs del futuro, y un aula magna para grandes eventos. Dentro de cada espacio, cada uno de los avatares participantes puede dialogar con quien desee, a través de lo que el metaverso llama “audio espacial”, que permite escuchar solo la conversación elegida.
Los defensores del Metaverso aseguran que es solo cuestión de tiempo para que esta se vuelva la nueva normalidad, tal como sucedió con los celulares. La educación online ya es una realidad creciente y el Metaverso parece tener el potencial de mejorarla ampliamente a través de una experiencia más inmersiva.
Fuente: Lanacion.com.ar