El ciclo Micrófono Abierto sigue creciendo como una iniciativa donde estudiantes, bandas locales y principiantes comparten su magia.
La Escuela de Música de la Universidad de La Punta (ULP) volvió a convertirse en el lugar perfecto para quienes están dando sus primeros pasos en la música y también para aquellos que ya tienen un recorrido. Y es que el cuarto encuentro de Micrófono Abierto fue, una vez más, un éxito total. A sala llena se presentó la Banda Blutú, formada por Azariel Guardia, Amelie Gil, Morena Orozco, Joaquín Mateo y Mateo Torres. También estuvo el cantautor de 14 años Tobías Antonio Hess Cadelago y la principiante Érica Cuello.
La propuesta, impulsada por la ULP, abre las puertas no solo a sus estudiantes, sino a toda la comunidad artística de San Luis. Explicada en la voz de los directivos de la institución, la iniciativa es un espacio para mostrar lo propio o versionar lo ajeno, sin importar si tienen experiencia o no. “Lo importante es animarse”.
En la noche del jueves, los presentes bailaron y corearon canciones de Babasonicos, Los Redondos, Los Abuelos de la Nada, Mon Laferte y Cazzu con un cierre de Hess Cadelago. Con solo 14 años y ocho como estudiante en la Escuela, Tobías cantó una canción de su autoría dedicada a sus abuelas fallecidas.
Micrófono Abierto es mucho más que una actividad cultural: es una política educativa en la que se descubren artistas y brillan los ya establecidos. Quienes deseen participar en futuras ediciones de Micrófono Abierto, pueden inscribirse a través del formulario disponible en el sitio web oficial de la ULP.