A través de la convocatoria del “Programa de Fortalecimiento de Biosimulación” para las carreras de Salud, la Secretaría de Políticas Universitarias asignó $13 millones de pesos a la Universidad Nacional de Villa Mercedes.
La Directora de la Escuela de Ciencias de la Salud, Lic. Vanesa Cassano, comentó que en setiembre de 2021 la UNViMe había presentado un proyecto para reforzar su equipamiento en biosimulación y ahora la SPU confirmó la aprobación del mismo.
Recordó que la Secretaría de Políticas Universitarias, a través del Programa de Calidad Universitaria, desarrolla distintas iniciativas de fortalecimiento de las Universidades de Gestión Pública, a partir del diseño de políticas públicas tendientes al logro de mayores niveles de calidad en los procesos de enseñanza y de aprendizaje y en sus resultados para la formación de recursos humanos tanto profesionales como científicos.
En este contexto, advirtió la necesidad de llevar adelante acciones tendientes al fortalecimiento de la formación de las Carreras de Medicina, Kinesiología, Obstetricia y Enfermería, mediante el desarrollo de Centros de Biosimulación, “los cuales han ganado espacio de consideración en los últimos años y sobre todo debido a la pandemia, donde por las restricciones no se podían realizar prácticas presenciales”.
La Lic. Cassano sostuvo que casi todo el dinero se va a destinar a la compra de nuevos equipos, algunos de los cuales ya se han adquirido y llegaron al Laboratorio Central, en tanto que aproximadamente $170.000 se dedicarán a capacitar a técnicos y docentes.
“Esta ayuda nos va a permitir seguir trabajando en nuestro proyecto, que es instalar un Hospital de Biosimulación, que no sólo va a estar destinado a nuestros alumnos, sino que va a ser abierto a la comunidad, para que puedan utilizarlo también los profesionales de la salud de nuestro medio”, señaló.
Por su parte el Coordinador del Laboratorio Central, Lic. Javier Ponce, informó que estos nuevos equipos se suman a los existentes y puso de relieve que “la pandemia dejó en evidencia todo el uso que se le puede dar a la biosimulación, que es algo relativamente nuevo, en todo el proceso de enseñanza aprendizaje”.
Destacó que el equipamiento más caro que se ha recibido son simuladores de cuerpo completo, que se manejan a través de un software que permite programar parámetros vitales (ritmo cardíaco, presión, ruidos pulmonares), de modo que el alumno puede auscultar y efectuar diagnósticos.
El especialista agregó que para el área de Enfermería, que ya cuenta con un Laboratorio de Prácticas Simuladas, también llegó un moderno sistema de audio y video, que es una plataforma que integra tecnologías y que permite grabar, reproducir y almacenar contenidos educativos generados en los espacios de simulación.
“Me animo a decir que la universidad es una de las pocas instituciones que posee esta aparatología en biosimulación y nos posiciona en el mejor nivel como centro de formación en el orden provincial”.